REGALOS MUY ECONÓMICOS

REGALOS MUY ECONÓMICOS                                              "Las palabras van al corazón, cuando han salido del corazón." Solón   Agasajar supone aprecio personal o sentimiento filantrópico; halagar indica, muchas veces, interés. Obsequiar denota siempre distinción. Se agasaja al huésped, se halaga al enemigo para que no haga un mal mayor o al poderoso para que ejercite el bien; obsequiar supone fineza, caballerosidad, hidalguía, generosidad, nobleza. El halago puede ser interesado, comercial, lisonjero; intenta ser amo de su señor. El agasajo es cariño, protección, cuidado. El filólogo Roque Barcia cuenta  el pedido que hacia una conocida mujer: "Quiero que me agasajen a mí, que obsequien a mi hija  y que halaguen a mi nuera". A veces surge la necesidad de conseguir un buen regalo para un ser querido; otras se trata simplemente de asistir a un compromiso social, a un anivesario o una fiesta ocasional, o de retribuir una atención con otra cortesía, con un cumplido. En los casos más importantes, solemos tropezar con una dificultad recurrente,  las limitaciones económicas. Las ganas de obsequiar con gusto nos llegan, a veces en las peores circunstanciasfinancieras. Precisamente cuando existen muchísimas ofertas en el mercado, nuestros bolsillos, con pésimos recursos de adquisición, abundan en nada. Por tal motivo, me parece importante comunicar la existencia de unos diez regalos muy económicos, indispensables para la sana convivencia valiosos como el aire nutriente. Se trata de atenciones jerarquizadas, espontáneas, siempre bien recibidas, que se agradecen como verdaderos hallazgos valiosos imprevistos. EL REGALO DE ESCUCHAR. Brindar a alguien nuestra receptividad silenciosa, nuestra capacidad de recibir su palabra, es generosidad excelente, vale mucho y no tiene precio. Esta ofrenda respetuosa de amistad exige una verdadera consagración al semejante, es atender totalmente lo que dice con palabras y gestos, comprender sin interferir con nuestro propio ruido personal. Es acallar la propia necesidad de hablar para estar ahí totalmente; es dar oidos, tomar en consideración sagrada a otra alma. Esta entrega reservada para recibir, porque sí, la palabra confesional de alguien a quien queremos es el agasajo más extraordinario que podamos ofrecer. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE UNA SONRISA. Este presente implica acuerdo, consentimiento, frescura, juego, ganas de encontrarse. Una sonrisa hermosea cualquier rostro; es un feliz agasajo que nada cuesta y lo dice todo. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE LA POESÍA, DEL CANTO O EL BAILE. "Me miras con tus ojos azules, nacidos del abismo. No me fulmines, cede, oh, cede, amante, y canta". dice Vicente Alexaindre en "Arcángel de las tinieblas". La poesía y el canto se unen en la gracia de un corazón exaltado, son fuentes inagotables del tierno acercamiento. Sus efectos son inspirantes y gratuitos. Quien puede expresarse plenamente con la voz, la palabra o el silencio tiene en su haber todos los recursos posibles del mundo, para nombrar en el canto, una y otra vez, el mejor y más esperado de los regalos: "te quiero". Abrazar un cuerpo en la danza es compartir musicalmente la liviandad de la existencia;  es como entregar la mente a un reposo ocasional por mandato de la armonía cósmica. La belleza de los movimientos despierta el corazón al ritmo de sus mejores latidos, es una oblación perfecta de muy bajo costo. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE UNA MIRADA Si es cierto que los ojos son la ventana del alma, los párpados son la persiana que protegen, de la mirada del otro, los secretos más íntimos del corazón. Mirar a los ojos es aceptar la mirada del otro en un diálogo de subjetividades, es entrega y admisión: "Por eso miro tu frente, donde dos arcos impasibles gobiernan mi vida sobre un mundo apagado". Desviar la mirada, por multiples razones, es estar cerca, pero no unido. Es fácil comprobar la fuerza de una mirada de simpatía; su contacto puede generar inmediato rubor, como si alguien estuviera festejando nuestros sentimientos. La ausencia de unos ojos francos o la negatividad de una mirada de soslayo nos pueden evaporar en el horror. El ojo es un equivalente simbólico del sol y del conocimiento. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE LA GRATITUD Fineza del alma que expresa reconocimiento, una muestra de grandeza compartida. No importa la magnitud del hecho; el agradecimiento es un efecto multiplicado en la resonancia interna. En un simple "muchas gracias" se puede encerrar, además, sin decirlo expresamente, algo tan complejo como... "festejo la vida, porque tú existes". -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE LA TERNURA Un cumplido, una notita, un dibujo, un beso sorpresivo,  una caricia, un abrazo, un piropo, un guiño,  enseguida ponen alegres los ánimos. La sorpresa de un pediluvio, de un masaje en los pies o en todo el cuerpo, en las extremidades superiores, medianas o inferiores, vitalizan sin farmacia. A todos nos conmueve sentir que nos estamos enamorando de nuevo, de instante en instante. Es disfrutar el día en technicolor, celebrar el momento, entusiasmarse con la fragancia de los jazmines, con la belleza de los atardeceres. Es compartir la tibieza de una mano compinche, la distinción de una llovizna y la elegancia de los lirios del campo; es regalarse al otro por unos instantes únicos. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE NO ESTORBAR. A veces lo que necesitan nuestros seres queridos más cercanos es estar un tiempo solos; retirarse de las rutinas, de las charlas y del clima de costumbre, descansar hasta de nosotros. Si nos animamos a respetar la necesidad de soledad que pueda tener alguien, estamos eligiendo un regalo de altísima calidad: no estorbar con nuestra presencia. Todos, en alguna circunstancia, hemos pedido a la vida  una experiencia de "desierto" fugaz, para que el alma trabaje bien consigo misma. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE UNA ORACIÓN. Elevar, secreta o públicamente, un pedido de protección para un ser querido es una ofrenda superior, queda inscripta en los archivos celesteiales como muestra sutil de amor. Sus efectos en el campo de las energías invisibles son incalculables, siempre benéficos, y no tienen costo alguno. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE LA RECONCILIACIÓN. El perdón, como per-donare, es una ofrenda a uno mismo, es congratularse con premio muy íntimo, un autorregalo que manumisa. El perdón tiene extraordinario poder sanador, todavía no suficientemente estudiado por los especialistas; se desconoce por que hace tanto bien a ls salud. Es una expresión de amor que libera a todos; significa ceder, dejar libremente que las cosas fluyan, sin que ello implique una negación de los hechos. La reconciliación vitaliza a las personas involucradas; es un regalo superior, una fineza que no implica ningún insumo material y que compromete a todo nuestro ser. -------------------------------------------------------------------------------- EL REGALO DE UN CUENTO. El cuento es como una perla. Si es diario, mejor. Hay mensajes perla; instantes perla, regalos perla. Sobreviven a la moda, no se olvidan, acercan. Son regalos sumamente económicos. Ayer, mientras realizaba un trámite,  regalé un libro a una funcionaria muy atenta del Consulado. Ella lleva el nombre de la primera novia que tuve, cuando tenía diez años; era muy fiel, y de niño nunca le pude hablar por una especie de parálisis expresiva que nos ocurría a los dos cada vez que nos encontrábamos, sólo alcanzábamos a mirarnos detenidamente. Le comenté, risueño, este hecho infantil a Marisa; al aceptar, feliz, mi obsequio, me dijo con emoción: "Mire, a veces he sentido que lo único que quería de la vida era que me regalasen una flor; hoy sólo deseaba encontrarme con un libro de cuentos. No sabe cómo se lo agradezco." Free Blog Content**